“Si amamos a Dios sobre todas las cosas, inmolémonos por Él. Si amamos al prójimo como a nosotros mismos, démosle la Fe, nuestro mayor Tesoro” – Plinio Corrêa de Oliveira
Página Mariana
Nuestra Señora del Pilar
De acuerdo con una antiquísima tradición, venerada y viva a lo largo de los siglos, la Virgen María cuando todavía moraba en este mundo, es decir, antes de subir en cuerpo y alma a los cielos, vino a Zaragoza para confortar y alentar al Apóstol Santiago.
El hombre necesita de una religión
La religión es el lazo que une al hombre con Dios. Este lazo se compone de deberes que el hombre debe llenar para con el Ser Supremo, su Creador, su Bienhechor y su Señor.
Dos modos de ver la vida del campo
Seis de la tarde. La faena diaria se ha terminado. La noble tranquilidad de la atmósfera envuelve la inmensidad de los campos, invitando al reposo y al recogimiento. Un crepúsculo color de oro transfigura la naturaleza, haciendo brillar en todas las cosas un reflejo lejano y suave de la inexpresable majestad de Dios.
Los ateos no tienen razón en sus dudas acerca de la existencia de Dios
Me permito un paréntesis, para aclarar que el ateo es aquel que niega la existencia de Dios, mientras que el agnóstico declara no saber si Dios existe o no. Y este último adopta una filosofía de vida comodista, pasando a vivir como si Dios no existiese.
San Luis Beltrán
En una época en que convertir y civilizar a los indígenas era una de las prioridades de la Iglesia, este santo pasó siete años entre los aborígenes de Nueva Granada.
+550, d.C. + Angers. Albino fue obispo de la diócesis de Angers entre el año 529 y el 550, fecha de su muerte. Había nacido en la región de Vannes hacia el 470 en el seno de una familia acomodada, se convirtió en abad a los treinta y cuatro años de edad, cargo que mantuvo hasta que en el año 529 fue elegido para ocupar el cargo de obispo de Angers. Próximo al rey merovingio Childeberto (511-558), convocó un concilio en Orleans en el año 538. Murió el año 550 y su cuerpo recibió sepultura en la iglesia dedicada inicialmente a Saint-Germain de Auxerre en Angers, levantada por Childeberto y San Germán de París, que a raíz del traslado del cuerpo de San Albino, sería conocida más adelante con la advocación de San Albino.